Un Empresario le dijo a su empleado: “Quiero que me construyas una
casa; aquí están los planos, ¡Quiero que la hagas conforme este diseño!… ¡No
quiero que falte nada!”. El empleado tomó los planos y molesto porque le
faltaban sólo 3 meses para jubilarse, comenzó a decirse: “¡Me faltan 3 meses
para jubilarme y este hombre me da un trabajo para seis meses, pues lo haré!…
¡Pero voy a utilizar materiales de segunda, no me voy a esmerar mucho, haré lo
que pueda, y así me quedará dinero para mí!”. Las columnas las hizo sin mucho
esmero, usó materiales baratos y de segunda, en toda la edificación de la casa
utilizo materiales no acordes a la estructura y solo se esmeró en la fachada
para engañar al dueño, y lo que podía saltarse en la fabricación lo hizo, de
tal manera se “ahorraría” el tiempo que necesitaba normalmente para hacerlo y
así irse lo más pronto posible. Cuando terminó la edificación, se presentó el
dueño y miró la casa, observó que habían algunos detalles pero se acercó a su
empleado y le dijo: “¡Toma las llaves!… ¡Este es tu regalo!… ¡Por todos los
años que me has servido!… ¡¡¡Esta es tu casa!!!” ¿Cómo cree usted que se sintió
este hombre al oír aquello? Él lamentablemente había cosechado lo que había
sembrado… Moraleja: Todo lo que hagas hazlo con AMOR, no dañes a nadie, sé un
buen ejemplo, da lo Mejor y recibirás lo Mejor…