martes, 31 de diciembre de 2019

Una nueva esperanza

El edicto de Nantes (abril 1958, Enrique IV rey de Francia) y que durante más de ochenta años había garantizado libertad religiosa a los hugonotes (protestantes calvinistas franceses) en Francia, estaba definitivamente revocado. Ahora, los protestantes quedaban fuera de la ley, y quienes practicaban la fe reformada eran perseguidos y recibían la pena de muerte. Muchos escaparon a Holanda, el cual era uno de los pocos países que toleraba la diversidad religiosa. No obstante, dado que Holanda se colmó de protestantes que escapaban de la persecución religiosa, los inmigrantes no tenían las condiciones económicas y sociales para establecerse allí. Para entonces, la Dutch East India Co. necesitaba granjeros para trabajar en Sudáfrica por lo que el 31 de diciembre de 1687 unos 180 hugonotes partieron hacia el Cabo de Buena Esperanza (hoy Ciudad del Cabo) el cual representó una nueva y buena esperanza para ese conjunto de fieles hijos de Dios. ¡Era el inicio de un nuevo sentido a su existencia! No sé cómo estás terminando este año. No se cuales fueron tus cargas, tus frustraciones, que te quitó el sueño o que te hizo llorar. Pero hoy puedes partir hacia el “Cabo de Buena Esperanza”, una bienaventurada esperanza en Cristo. Hay un año diferente allí adelante, esperándote. Pero tienes que dejar atrás el pasado. Hoy puede ser un día histórico. Solo tienes que entregar a Jesús el timón de tu vida y él se encargará de que llegues a salvo al puerto de una nueva esperanza.