El Gran Conflicto entre el Bien y el Mal es el gran tema de la
batalla entre Cristo y Satanás, el cual está entretejido en toda la Biblia,
desde las páginas iniciales hasta el cierre de esta. Es la lucha entre dos
semillas: La semilla de la serpiente (Satanás) y la semilla de la mujer (Cristo
y su iglesia) Génesis 3: 15. La historia redentora se comprende mejor en el
contexto de este conflicto que comenzó en el cielo cuando un tercio de los
ángeles, bajo la dirección de "Lucifer", eligieron rebelarse contra
Dios (Isaías 14: 12-14, Ezequiel 28: 14–17 provocando una gran batalla en el
cielo según Apocalipsis 12: 4 y 7 – 9. La rebelión no prevaleció y el conflicto
se trasladó a la tierra convirtiéndose en una batalla universal que afecta a
cada ser humano (Apocalipsis 12: 12 – 17 y 1 Pedro 5: 8), hasta que concluya
con la Segunda Venida de Cristo y la inminente destrucción de
"Satanás" (Apocalipsis 20: 10). El relato de Génesis 3 es posterior a
la caída de Satanás el cual es simbolizado como "la serpiente". Casos
como Abel y Caín, Sem y Cam, el intento de asesinato del niño Moisés y del niño
Jesús son ejemplos de esta feroz batalla entre el Bien y el Mal. Como Satanás no pudo matar al Hijo, tratará de dañar al Hijo por
medio de la iglesia atacándola con falsa doctrina y herejía (Apocalipsis 12: 17
y Daniel 12: 1). Sin embargo, no podrá porque ni siquiera “los poderes del
infierno prevalecerán contra la Iglesia Única de Dios” (Mateo 16: 18).