lunes, 10 de agosto de 2020

No hagas ni digas más de lo que dice la Biblia


El apóstol Pablo dice en Romanos 15: 4 que todo lo que está escrito en la Biblia es para nuestra enseñanza. El problema no radica en lo que está escrito, sino en “cómo se enseña”. Hoy más que nunca, es imprescindible mantener la disciplina de los bereanos (Hechos 17:11) al examinar meticulosamente y a través de un estudio profundo, todo aquello que los educadores bíblicos transmiten. En las Escrituras existen verdades “explícitas” que resultan de una primera lectura de las palabras, así como verdades “implícitas” que se descubren a través de un examen detenido. La Biblia contiene la información, las instrucciones, las promesas y advertencias que el hombre necesita, pero el hombre tiene que emplear la facultad mental que Dios le da para entenderlas (Mateo 16: 5 – 12). Y aunque se te ha eximido de lo que Dios no revela (Deuteronomio 29: 29) debes tener cuidado en hacer o decir más de lo que la Biblia dice (1 Corintios 4: 6).