Charles Spurgeon decía que: “El chisme emite un veneno triple,
porque hiere al que lo dice, al que lo escucha, y a la persona de quien se
habla”. Lo que escuchas de otra persona puede ser tan cierto o puede ser tan
falso como la persona que te lo cuenta. Nunca olvides que lo que Juan dice de
Pedro dice más de Juan que de Pedro. ¿Cuál es el problema? El problema es que
la lengua no tiene huesos, pero es lo suficientemente fuerte para romper un corazón,
por eso debemos tener cuidado con lo que se dice… El chisme siempre traerá sufrimiento.
La persona chismosa es como un terrorista que lanza una bomba, destruye y se
marcha. La persona chismosa divide a los buenos amigos. Donde entra un
chismoso, entra la división. No te juntes con la gente que habla de más: Si los
escuchas, ellos mismos, mañana hablaran mal de ti. Quien te trae chismes de
otros también contara chismes de ti a los otros. El envidioso inventa un rumor
que el chismoso difunde y el idiota lo acepta sin oponer resistencia. George
Bernard Shaw decía que: “Un chisme es como una avispa; si no puedes matarla al
primer golpe, mejor no te metas con ella. ¿Cuándo muere el chisme? ¡Cuando llega al oído
de una persona inteligente que no lo repite! Cuando escuches chismes sobre ti
¡Vuela alto! Cuando te critiquen sin razón porque quieren hacerte daño ¡Vuela más
alto aun! Recuerda… Los reptiles no alcanzan las alturas… solo pueden
arrastrarse.