A veces no se puede explicar lo que vemos en una persona. Es
simplemente la forma en que la persona te hace sentir todo y nadie más lo hace.
Esa persona que te hace vibrar de un modo ¡Diferente! Sientes vértigo cuando
recibes un mensaje o una llamada en tu móvil y aunque no siempre tiene algo
importante que decirte, siempre tienes ganas de escucharle. Su voz te produce una
sensación parecida cuando subes a una montaña rusa, una sensación de que puedes
morir, pero que quieres hacerlo de todas maneras. Sientes una gran atracción física
y sentimental ¡Te enamoras de su alma! Y aun sabiendo lo que es, que tal vez no
sea un amor fácil, que tal vez le vas a extrañar, que será muy difícil verle
partir y esperar su regreso ¡Aun así le sigues esperando cada vez que sea
necesario! Le conociste como a cualquiera sin buscar nada, y has terminado queriéndole
como a nadie encontrándolo todo. Hacía mucho tiempo que no sentías esas
cosquillas en el estómago, ese latido apresurado, ese pensar en alguien todo el
tiempo. Te hace sentir de todo después de tanta soledad y ya no quieres
soltarle. Cada mañana que despiertas se convierte en tu primer pensamiento. Tu
esperanza de verle es la chispa necesaria para que tu corazón se ponga en
funcionamiento y nada lo pueda detener. Se cruzó en tu camino y desde ese día
todo fue diferente.