Alejandro Jodorowsky decía que: “Es difícil que alguien te rompa
el corazón, casi siempre eres tu quien lo rompe mientras tratas de meterlo a la
fuerza donde bien sabes que no cabe”. Así que ¡Tómalo con calma! Algún día encontraras
a alguien a la medida. Que se olvide de tu pasado, de tus fracasos, que no le
importe lo que fuiste, lo que hiciste, lo que algún día por malos actos tal vez
perdiste. Alguien que te levante, que te perdone, que te cuide, que llore
contigo y si es necesario te haga llorar, alguien que te entienda cuando ni
siquiera tú lo haces. Alguien que al entrar en tu vida te hará saber porque no funcionó
nada con alguien más, alguien a la medida. Cuando llegue ese alguien te cambiará
la vida y te la hará menos complicada. Poco a poco, día a día, sonreirás y ¡Confiarás
que lo mejor está por venir! Raro, especial, de ese tipo de personas por las que
vale la pena luchar. Y te enseñará que la vida no es pasar las hojas del
calendario, si no entender que cada hoja de ese calendario es única e
irrepetible. Ya vendrá alguien que te robe la razón, alguien que te devuelva la
pasión, alguien que te parche el corazón. Ya vendrá alguien a tu medida, a tu
altura, alguien que disfrute tu locura, alguien que te desnude con ternura. ¡Tarde
o temprano todas las piezas acaban encajando!