¿Sabías que las malas actitudes nos etiquetan? Había un hombre de
pésimo carácter y genio violento que tenía un árbol de limón agrio a la par de
su casa, por lo cual la gente del barrio lo apodó “El señor del limón agrio”.
–Ese apodo es atroz- dijo el hombre y cortó el árbol. Como en el suelo quedó el
tronco, la gente comenzó a llamarlo “El señor del tronco”. Más furioso que
nunca hizo desenterrar el tronco y sacarlo de allí con lo que quedó un profundo
pozo. Ahora la gente lo llama “El señor del pozo”. Y a ti… ¿Cómo te conocen en
tu barrio?