Para evitar malos entendidos y confusiones dentro del gremio
masculino, he decidido elaborar un manual de bolsillo para comprender mejor a
las mujeres. Por ejemplo, cuando una mujer dice que no pasa nada, es que todo
va mal. Cuando dice que todo va mal, es que TODO, absolutamente todo está mal.
Y cuando una mujer dice que no tiene gracia más te vale parar de reírte. Ahora,
si una mujer te dice ¿Qué qué??? No es que escucho mal… es que en su infinita
misericordia te está dando chance de que te arrepientas de lo que acabas de
decir. Peor aún, si una mujer te dice “Dime la verdad” ¡Es porque ya la
sabe! Y cuando te dice: “¿Seguro?”
Piénsalo 1000000 de veces. Si una mujer te dice que tiene que pensarlo
significa que ya lo ha pensado y ahora está buscando palabras adecuadas para
expresarlo. En cambio cuando la mujer dice que no, es que no, salvo que sea si
pero diga que no por no decir si para que sea si aunque no lo diga, y diga no.
¿Vio que fácil? Si una mujer te dice “Nada aquí aburrida” ¡Corre a su casa!
Lleva películas, helado y chocolates. Cuando una mujer dice “No me importa”, en
realidad es en lo único que piensa. Y si te dice: “Haz lo que quieras” ¡Ojo!
¡No hagas lo que quieras! Quédate quieto, no respondas, no respires, no
parpadees y hazte el muerto. Y si te dice: “No me pasa nada” En un universo
paralelo te está asesinando con una sierra eléctrica. ¿La peor de todas? Si una
mujer te dice “tengo frio” y tú le respondes “yo también” ¡Fracasaste como
hombre!