sábado, 29 de abril de 2017

Dar para recibir


Un árabe, que iba de viaje, halló a tres hombres que discutían acaloradamente frente a un lote de camellos. El árabe se detuvo y les preguntó el motivo de la controversia, y uno de ellos le respondió: -Somos hermanos y recibimos treinta y cinco camellos como herencia de nuestro padre.

Yo, el mayor, debo quedarme con la mitad de los animales. Este, que es el segundo, debe recibir la tercera parte. Y aquel, el menor, la novena parte. Entonces otro de los hermanos dijo: -¡Pero es imposible hallar la mitad exacta, y más aún la tercera y la novena partes de treinta y cinco! El árabe desmontando de su propio camello, lo agregó al lote de los que habían heredado los hermanos. 35 + 1 = 36. Le entregó la mitad (18) al hermano mayor. La tercera parte (12) al segundo y al menor la novena parte (4) del lote. Entonces el árabe hizo cuentas: -Tú has recibido dieciocho camellos, tú doce y tú cuatro, más de lo que les correspondía, por ser la herencia de 35 camellos. 18 + 12 + 4 = 34. Quiere decir que de los treinta y seis camellos, sobran dos. Uno es el que yo puse. Y el otro, el que me corresponde por haberlos ayudado a obtener lo que les correspondía. ¡Y todos quedaron contentos!