Alguien dijo que la vida se divide en etapas. Cuando eres joven
tienes todo el tiempo y la energía, pero no tienes dinero. Cuando eres adulto tienes
dinero y energía pero no tienes el tiempo y cuando eres anciano tienes el
dinero y el tiempo, pero no la energía. Por tanto, disfruta la vida con todo lo
que tengas en el momento, porque no podrás tenerlo todo al mismo tiempo. Poco a
poco y sin proponértelo te acostumbras a cada etapa de tu vida. Has aprendido,
estas aprendiendo y continuarás aprendiendo
a practicar el arte de vivir. Ojalá lo hagas de la mejor manera posible,
sin lastimar y para tu satisfacción, procurando entregar la mayor cantidad de
felicidad a las personas que amas. Sabes que la vida es por etapas y si estás
viviendo una etapa difícil, recuerda que es solo eso ¡Una etapa! Es temporal y
todo pasa. Pero no la dejes pasar sin aprender, crecer, madurar y hacerte más
fuerte. Siempre hay algo bueno en cada etapa de la vida. También hay un punto
en la vida en que algunas etapas tienen que ser quemadas. Cierra etapas para abrir otras nuevas ¡Para avanzar!
Decía Cohelo que: “Siempre es preciso saber cuándo se acaba una etapa en la
vida. Si insistes en permanecer en ella, más allá del tiempo necesario, pierdes
la alegría y el sentido del resto”.
