Demasiadas personas pasan la mayor parte de sus días sumergidos en
una avalancha de pensamientos negativos auto impidiéndose lograr grandes
resultados cuando mentalmente se colocan en el lado negativo de la balanza. Al
igual que debemos mirar con cuidado qué alimentos tomamos cada día, hemos de
ser igualmente cuidadosos con el "alimento" que le damos a nuestra
mente. El nivel de éxito en la vida está determinado en gran medida por el tipo
de libros que se leen, las amistades que se cultivan, y por todo lo que se
absorbe a través de los ojos. ¿Están potenciándote positivamente las lecturas
que realizas en la actualidad? ¿Te sientes más animado después de hablar con
tus amigos? ¿Te inspiran los programas que ves en la televisión? Lees, escuchas
y ves que hay cosas que deberían cambiar o podrían estar mejor, pero está en ti
el desafío de convertirte en un agente de cambio y lo primero que debes hacer
es dejar de echarle la culpa a los demás y verte como parte del problema para
que puedes ser parte de la solución y alcanzar excelencia mediante un proceso
de mejora continua. La gran devastación
que produjeron las bombas atómicas lanzadas en el Japón en la Segunda Guerra
Mundial obligó a sus ciudadanos a crear
una serie de filosofías de mejora con el propósito de devolverle el
brillo a su nación tal es el caso de la filosofía KAISEN que se traduce como:
“Hoy mejor que ayer, mañana mejor que hoy”. Alcanzar los mejores resultados, no
es labor de un día. Lo deseable es mejorar un poco día a día, y tomarlo como
hábito, y no dejar las cosas tal como están!