lunes, 29 de mayo de 2017

Montaña rusa


La vida es como una montaña rusa. Tiene sus altos y sus bajos… por ratos parece divertida y por momentos nos aterra. Pero tú eliges si te asustas o disfrutas el viaje. No hace falta conocer el peligro para tener miedo; de hecho, los peligros desconocidos son los que inspiran más temor. Pero depende de quién va contigo al lado en el carrito y de las cosas que te gritan quienes vienen detrás. Depende si vas con los ojos abiertos o cerrados o si te agarras o te sueltas en las bajadas y en las vueltas muy cerradas. También depende si le tienes miedo a las alturas o si te emociona la velocidad. La vida es para los que se arriesgan, no para aquellos que la ven pasar. Porque vivir la vida es subir, bajar, emocionarse y asustarse, sorprenderse y sudar. Es hacer locuras, llorar y reír, pasar calor y frio ¡Vivir grandes momentos! Porque cada subida y bajada nos deja una nueva historia. Puedes gritar cada vez que hay una caída, o puedes gozar cada uno de los momentos que estas en ella. Y al final después de ver el camino recorrido solo te queda una sonrisa en los labios y la satisfacción de saber que tuviste el valor para subirte. ¡Abre los ojos, levanta tus manos y disfruta de la montaña rusa de la vida!