Decía Pablo Neruda que: “La felicidad es interior, no exterior;
por lo tanto, no depende de lo que tenemos, sino de lo que somos”. Existe un imán
en el corazón que atrae a las personas verdaderas a tu vida. Se llama ALTRUISMO:
Pensar primero en los demás, dar tu vida por los demás. Si aquello que entregas
nació de corazón… allí donde lo deposites será bien recibido. La sola idea de
saber que has ayudado a una persona a conseguir algo, hace que te olvides de
tus debilidades. Con el tiempo y la madurez, descubres que tienes dos manos:
una para ayudarte a ti mismo y otra para ayudar a los demás. Si cada uno
buscara hacer feliz al que vive a su lado, el mundo sería un paraíso. Eduardo
Galeano dijo que: “Mucha gente pequeña, en lugares pequeños, haciendo cosas
pequeñas, puede cambiar el mundo”. Nuestro propósito primordial en la vida es
el de ayudar a los demás. Si no puedes ayudarlos, por lo menos no les causes
sufrimiento. “No hay que apagar la luz del otro, decía Gandhi, para lograr que
brille la nuestra”. Leí en algún lugar que no importa lo grande que te “creas”
¡Más alto es un poste y lo mean los perros! Mario Moreno “Cantinflas” dijo: “Yo
amo, Tu amas, El ama, Nosotros amamos, Ellos aman. Ojala no fuese conjugación sino
realidad”.
