El autor Bennett Cerf escribió que J. William Stanton,
representante por muchos años de Ohio en el congreso de los Estados Unidos, atesoraba
una carta que había recibido de la Cámara de Comercio de Painesville, Ohio, fechada
1949. La carta rechazaba la oferta de Stanton de traer a un nuevo congresista
como orador en una cena para levantar fondos. La misiva decía: «Sentimos que
este año realmente necesitamos a un gran orador, y esperamos que el entrenador
de fútbol americano de la Universidad John Carroll acepte. Gracias de todas maneras
por sugerir al representante John F. Kennedy».' ¿Sabe usted quién era ese
entrenador? Yo no. Tiene usted a un potencial John F. Kennedy en su equipo? ¿O
quizás a una madre Teresa? Es fácil reconocer un buen liderazgo y un buen
talento una vez que las personas ya han florecido, pero no es lo mismo antes de
que suceda. Busque el gran potencial que se encuentra dentro de cada persona que
usted dirige. Cuando lo encuentre, esfuércese en desarrollarlo!