Ella, puede ser el rostro que no consigo olvidar,
un rastro de alegría o de pesar, puede ser mi tesoro o el precio
que tengo que pagar.
Ella puede ser la canción que el verano canta, puede ser el frio
que el otoño trae, puede ser cien cosas distintas a lo largo de un día.
Ella, puede ser la bella o la bestia, puede ser la necesidad o la
abundancia, puede convertir cada día en un cielo o en un infierno.
Ella puede ser el espejo de mis sueños, una sonrisa reflejada en
una corriente de agua, ella puede no ser lo que parece dentro de su coraza.
Ella, que siempre parece tan feliz en la multitud, cuyos ojos
pueden ser humildes y orgullosos, a nadie tiene permitido verlos cuando lloran.
Ella puede ser el amor que no puede esperar que persista, puede
venir a mí desde las sombras del pasado que recordaré hasta el día de mi
muerte.
Ella, puede ser la razón por la que sobrevivo, la causa por la que
estoy vivo, a la que cuidare durante los buenos y los malos años.
Yo, tomare su risa y sus lágrimas, y todas las convertiré en mis
recuerdos, porque a donde ella vaya yo tengo que estar.
El sentido de mi vida es... Ella. (Elvis Costello)