Han pasado siete horas y quince días desde que te llevaste tu amor.
Salgo todas las noches y duermo todo el día.
Desde que te fuiste puedo hacer todo lo que quiera.
Puedo ver a cualquier hombre que elija.
Puedo cenar en un restaurante elegante, pero nada, dije: nada puede llevarse esta tristeza.
Porque nada se compara contigo
Ha sido tan solitario sin ti aquí, como un ave sin una canción.
Nada puede parar estas lágrimas solitarias de caer.
Dime cariño, ¿dónde me equivoqué?
Podría poner mis brazos alrededor de cada hombre que vea.
Pero ellos solamente me recordarían a ti
Fui al doctor y adivina que me dijo.
Él dijo: Señora, mejor trate de divertirse, no importa lo que haga.
¡Pero él es un tonto! Porque nada se compara contigo.
Todas las flores que plantaste en el patio de atrás.
Todas murieron cuando tú te fuiste.
Nada se compara contigo. (Sinead O'Connor)