miércoles, 10 de mayo de 2017

Ni accidente ni gran pèrdida


El Presidente de Costa Rica va a visitar una clase de una escuela primaria. La maestra le saludó e interrumpió la lección acerca de los vocablos y sus significados e invito al Presidente para que participara en la discusión sobre el significado de la palabra "tragedia". El presidente pidió a la clase un ejemplo de frase que incluyera el vocablo "tragedia". - Si un amigo mío está jugando en la calle y lo atropella un automóvil, eso es una tragedia -dijo un niño. - No -respondió el mandatario-. Eso sería un accidente. - Si un autobús de transporte escolar cae por un barranco y mueren todos sus ocupantes, eso sería una tragedia -dijo una niña. - Me temo que no -sostuvo el Presidente- A eso podríamos llamarlo una gran pérdida. Finalmente, en el fondo de la clase, un niño pequeño levantó su mano y con voz muy tenue, se animó a decir: - Si el avión en el que viajan el Sr. Presidente y todo su Gabinete es destruido en vuelo por un misil, haciéndolo añicos, eso sería una tragedia. -¡Fantástico! -dijo el presidente-. ¡Eso está muy bien! ¿Y podrías decirme por qué eso sería una tragedia? - Sí, claro -explicó el pequeño-: Porque, en primer lugar, no sería un accidente, y en segundo lugar, tampoco sería una gran pérdida.