martes, 9 de mayo de 2017

¿Quièn empacò hoy tu paracaidas?


Charles Plumb, era piloto en la guerra de Vietnam. Su avión fue derribado y Plumb se lanzó en paracaídas. Fue capturado y pasó seis años en prisión. A su regreso a Estados Unidos, daba conferencias relatando su odisea y sus experiencias en el lugar de detención. Un día se le acercó un hombre y lo saludó: -Hola, usted es Charles Plumb, ex piloto en Vietnam y fue derribado por el enemigo, ¿verdad? -Y usted, ¿cómo sabe eso?", le preguntó Plumb. -Porque yo doblaba y empacaba los paracaídas de su división, y parece que el suyo funcionó bien! Plumb emocionado y con mucha  gratitud le respondió: -Claro que funcionó, si no hubiera funcionado, hoy yo no estaría aquí. Aquella noche, Plumb no podía conciliar el sueño, se preguntaba cuántas veces había visto en el portaviones a aquel hombre y nunca había dirigido un saludo al humilde y servicial marinero que al enrollar los hilos de seda de cada paracaídas, tenía en sus manos la vida de personas que quizás no conocía. Uno necesita muchos paracaídas en el día: físicos, emocionales, espirituales, etc. Los constantes desafíos que la vida nos trae, nos hace perder de vista a las personas que nos salvan en el momento oportuno sin que se los pidamos. Trata de darte cuenta quien prepara tu paracaídas, y agradécelo. Por mi parte quiero darte las “Gracias por todos los favores que sin merecerlos he recibido  de ti y que nunca te los he agradecido”.