Tu mano fue en aquel tiempo continuación de la mía,
sé que llorabas mi llanto y gozabas mi alegría.
Tenías la risa franca y tu mirada era altiva,
tu pasado era el misterio que nunca revelarías
Hace un año que el destino quiso una mañana fría
que con el alma cansada llegaras hasta mi vida.
Nos quisimos buenamente, pero yo no presentía
las alas que tú llevabas en tu alma golondrina.
Y así te fuiste de pronto, sin adiós sin despedida,
vuelve ya que sin tu amor tengo las manos vacías
Cuando por primera vez nos vimos en esta esquina
ya supe que del amor ya estabas atardecida.
Y te dejaste querer, mansamente entré a tu vida
más cuando por mi nació tu amor, te sentiste herida.
Luchaste, sé que luchaste pero ganó la partida
la pasión con que me amaste y esa ternura tan niña.
Tenías miedo de amar y entonces volaste un día
con las alas que llevabas en tu alma golondrina.
Y así te fuiste de pronto, sin adiós sin despedida,
vuelve ya que sin tu amor tengo las manos vacías. Jairo)