Maravillosa, tú, madre, que sólo por ser mujer te tienes ganado el
cielo, que como cualquier madre del mundo tienes la lucha diaria y afrontas con
valentía esa entereza que el hombre cobarde quiere para sí mismo, que tu
ternura divina el niño la necesita y te pide con cariño que jamás le falte a
él, y el anciano pide manos, pero manos femeninas llenas de dulzura innata,
para saciar sus torpezas que los años le dejaron, tú mujer de infinitos
parentescos, ya seas madre o abuela, hermana, esposa o amiga... Al fin y al
cabo mujer por siempre bendita seas, que si la belleza existe a ti te debemos
la vida, nunca abandones al mundo, el mundo necesita de ti, inteligencia
suprema para seguir adelante, tu belleza y autoestima, para ser regalada a
todos, sabía y talentosa, todo el halago aún es poco para tan grandiosa esencia
de humildad y resistencia, coraje y perseverancia, por todo eso mujer hoy te
suplico... No cambies ese destino y alza la mirada al cielo y sigue pidiendo
deseos, el respeto merecido y el amor por complacerte siga siendo mucho más que
el que hasta ahora ha sido, mujer, tú lo mereces todo, hoy celebro con orgullo
en tu nombre y con tu permiso te adoro... que mil letras a una mujer no tienen
mayor importancia e invádeme tu espíritu para parecerme a ti, gracias por ser...
Linda y dulce... mamá Maru.