lunes, 26 de marzo de 2018

Eres lo que publicas



El apóstol Pablo dijo: “Se dice: Uno es libre de hacer lo que quiera. Es cierto, pero no todo conviene. Si, uno es libre de hacer lo que quiera, pero no todo edifica a la comunidad”. ¿Sabías que hablar es vestir el pensamiento con palabras? Con tantos ojos y oídos pendientes, elegir la ropa justa y la ocasión para lucirla, es clave para dominar el arte”. Un tercio de las empresas asegura haber rechazado a un candidato por tener un perfil incorrecto en las redes sociales. Peor aún, más de la mitad de nuestras adolescentes han enviado alguna sexting (imágenes de ellas mismas con poca ropa o en posiciones eróticas) como regalo para sus novios. Y aunque estas imágenes sean borradas de los Smartphone, quedarán registradas en “servidores” ubicados en algún lugar del mundo. Estas imágenes son propensas a ataques de hackers quienes a través del Ciberbullying pueden permanecer en Internet durante toda la vida. Erróneamente nos han hecho creer que el mundo virtual nos permite experimentar roles inimaginables, llevándonos a la conclusión de que nuestro mundo virtual es mejor que el real. Estar conectado significa que podemos encontrar a más gente, pero que también más gente nos puede encontrar a nosotros. No todas estas personas son bienintencionadas y no todas las conexiones son positivas. ¡No estoy diciendo que las redes sociales sean malas en sí mismas! Madame Curie dijo: “Nada en la vida debe temerse. Solo debe entenderse”. Sin embargo, si me preguntas: ¿Cuál es la mejor red social? ¡Una mesa rodeada de las personas que tu más quieres!”.