La gente espera toda la semana el viernes. Todo el año el verano y
toda la vida la felicidad. ¿Y Tú? No sé a qué esperas, si el tiempo no espera a
nadie. La vida es corta: 1. Cómprate esos zapatos. 2. Pide el vino. 3. Comete
el maldito chocolate. Tu problema es que esperas demasiado de alguien que no te
demuestra nada. Qué bonito sería si esa persona hiciera lo que esperas sin que
se lo pidas. ¡Pero no es así! Entonces vives quejándote de todo y a la vez
fingiendo no darle importancia a nada, vives de esperanzas pero no sabes ni qué
esperas. Y mientras esperas lo que nunca llegará, llega a ti lo que menos te
esperabas. A veces lo que esperas nunca llega, es lo inesperado, lo que te
cambia la vida. ¡No esperes nada de nadie! Espera todo de ti. Si no esperas
nada de los demás, te evitarás muchas decepciones. ¿Por qué aguardas con impaciencia
las cosas? Si son inútiles para tu vida, inútil también es aguardarlas. Si son
necesarias, ellas vendrán a tiempo. Las mejores fotos son las que se sacan distraído,
los mejores besos son los robados, las mejores relaciones empiezan de la nada,
los mejores abrazos son los que se dan cuando menos te los esperas. Deja fluir
a la vida y encontrarás puertas donde menos te lo esperas.