domingo, 2 de julio de 2017

Aprende a distinguir


Muchas personas rompen el corazón de otros de todas las formas imaginables ¡Eso está garantizado y nadie puede explicarlo! La vida no es justa  pero debes afrontar los golpes y seguir adelante. Decía Chris Griscon que: “Aquellas personas que nos provocan sufrimiento, están llevando a cabo un gran acto de servicio, porque nos proporcionan información a través de esa experiencia sobre adonde necesitamos llevar más luz”. ¡Recuerda que maduramos con los daños y no con los años! No pierdas tu tiempo en vengarte, no merece la pena. Las personas que te hacen daño suelen acabar destruyéndose a sí mismos. ¡Tampoco los odies! Porque odiar es como beber veneno y sentarse a esperar a que la otra persona muera. Oscar Wilde decía: “Perdona siempre a tu enemigo. No hay nada que le enfurezca más”. Tal vez no puedas cambiar el “por qué” los demás actúan de determinada manera, pero puedes elegir entrar en su juego. A veces el silencio es la mejor manera de decirle a alguien que te hizo daño. Aléjate de la compañía que te desgasta emocionalmente. Tomar distancia de las relaciones tóxicas no significa que seas egoísta, es solamente una acción que protege tu salud emocional. ¿Cómo pretendes volar; si no te alejas de los que te arrancan las plumas? Seguir aferrado a relaciones poco nutritivas es no permitir el ingreso de nuevas personas en tu vida. Acércate a las personas que te hagan sentir bien, que aportan paz, armonía y alegría. Aléjate de aquellas que son negativas y te causan dolor.