¿Sabías que las personas que construyen imperios dedican horas y
horas al trabajo mental… mientras los demás se divierten? Uno de los mayores
placeres de la vida, es lograr aquello que otros dijeron que no lograrías. Por
tanto, ¡No digas NO PUEDO ni en broma! Porque el inconsciente no tiene sentido
del humor; lo tomara en serio y te lo recordara cada vez que lo intentes. No
olvides que un mal hábito entra como un huésped, se une a la familia y,
finalmente, se hace con el control. Tan pronto tomamos la decisión de hacer
algo, aparecen los medios para llevarlo a cabo. Para que surja lo posible es
preciso intentar una y otra vez lo imposible. La diferencia entre lo que
hacemos y lo que podemos hacer sería suficiente para resolver la mayor parte de
los problemas del mundo. Nunca digas no puedo si aún no lo has intentado. En muchas
ocasiones esta frase suena en las conversaciones. Si la decimos, nos limitamos aún
más. ¿Para qué? Así nos programamos a que jamás podremos hacer nada. Si quieres
lograr algo mejor, ¡Date una oportunidad! Levántate, suspira, sonríe, y sigue
adelante… Si luchas por lo que quieres tarde o temprano, llegará.