“Nacemos solos, vivimos solos, morimos solos, decía Orson Wells.
Solo a través de nuestro amor y amistad podemos crear ilusión por el momento de
que no estamos solos”. Ilusión que se desvanece, cuando en el bullicio de la
ciudad, fácilmente somos ignorados por los demás, cuando buscas una mano y solo
encuentras puños. La gente cree que estar solo te hace un solitario, pero se
equivocan… estar rodeado de la gente equivocada es lo más solitario que hay en
el mundo. Si te sientes en soledad cuando estas acompañado, ¡Estas en malas
compañías! Y la peor cosa de la vida no es terminar solo, ¡Es terminar con alguien
que te hace sentir solo! Por tanto, cambia de compañía. Inicia una nueva
relación con la LIBERTAD. Nunca están solos los que están acompañados de nobles
pensamientos. Las personas más solitarias son las más amables, las que ofrecen
una sonrisa más brillante, las más sabias… Todo porque no quieren ver que nadie
más sufra como ellos lo hacen. Son como el lobo solitario que se pasa sus días
con su sombra, pero acude al llamado de ayuda. Por su mucha soledad valoran la
compañía, por su mucha tristeza disfrutan de los momentos felices y por sus
muchas decepciones no se fían de nadie. Guardan distancia y la recorren por
dentro… Un brindis por aquellos que el 24 de diciembre deciden cenar solos… que
no se comparan con aquel que tiene compañía, que aprovechan para reflexionar y
descansar y no aceptan invitaciones que los vayan a lastimar. ¡Salud!