martes, 19 de diciembre de 2017

Enigmàtico

En un mundo que se torna cada vez más banal y conocido, lo que parece enigmático llama la atención de inmediato. Nunca deje demasiado en claro que es lo que hace o está por hacer ¡No muestre todas sus cartas! Un cierto aire de misterio realza su presencia. Además, crea expectativas: todo el mundo le prestará atención, para ver qué es lo que sucede a continuación. El mundo se ha vuelto tan conocido, y sus habitantes, tan predecibles, que aquello que se envuelve en un misterio casi siempre ocupan el centro del escenario y atrae nuestra mirada. Existen momentos en que se debe postergarse la necesidad de llamar la atención, cuando lo menos deseable es generar escandalo o notoriedad. En este caso ser el centro de atención no es lo que puede resultar más conveniente. Lo misterioso invita a interpretaciones distintas, estimula nuestra imaginación, nos seduce hasta hacernos creer que oculta algo maravilloso. Alguien dijo que: “Lo que no se alcanza a comprender se explica mediante mitos y espíritus”. El misterio que se entreteje en su actitud cotidiana de forma sutil encierra fascinación y llama mucho la atención en los demás. Muéstrese reticente, guarde silencio, actúe diferente. Después, las personas que lo rodean magnificarán esa aura, al tratar constantemente de interpretarlo.