jueves, 22 de junio de 2017

El beso de la muerte


Alguien dijo que la muerte es la única que te besa para dejarte sin aliento para siempre y esta tan segura de su victoria, que nos da toda una vida de ventaja. Aunque la vida no es igual para todos, la muerte si lo es. Al final del juego el rey y el peón van a la misma caja. Dice Coello que: “El hombre es el único ser en la naturaleza que tiene conciencia de que va a morir. No se da cuenta de que, con la conciencia de la muerte, sería capaz de ser más osado, de ir mucho más lejos en sus conquistas diarias, porque no tiene nada que perder, ya que la muerte es inevitable”. El débil teme la muerte; el desdichado la llama; el valiente la provoca y el osado la espera. No se le debe temer tanto a la muerte, sino más bien a la vida inadecuada. ¡No hay que lamentarse por la muerte! Lo terrible no es la muerte, sino las vidas que la gente vive o no vive hasta su muerte. Benedetti dijo que: “La muerte se venga de nuestras vacilaciones, la vida se compone de tres etapas: Vacilar, vacilar y morir, la muerte en cambio no vacila frente a nosotros.” La vida es una fiesta mortal, solo podemos salir de ella sin vida y como ello es inevitable, disfrutemos y crezcamos al máximo antes de partir. ¡Vive de tal modo que la muerte te encuentre tan vivo que hasta dude de llevarte!