martes, 5 de septiembre de 2017

Apariencias


Es triste vivir en un mundo donde la apariencia vale más que la personalidad. Nicolás Maquiavelo decía que: “Pocos ven lo que somos, pero todos ven lo que aparentamos”. ¿Sabías que las apariencias engañan? ¡Y más engañaran a quien solo se fije en la apariencia! No confíes en lo que ves. Incluso la sal se ve como azúcar. Es preferible vivir la vida reconociendo que no somos perfectos, en ver de vivir la vida pretendiendo ser alguien que no somos. Recuerda que las apariencias siempre cambian y que las mentiras, al final se descubren. “No hay más realidad que la que tenemos dentro, decía Hermann Hese, Por eso la mayoría de los seres humanos viven tan irrealmente, porque creen que las imágenes exteriores son la realidad y no permiten a su mundo interior manifestarse”. Cuando veas un gigante, examina antes la posición del sol; no vaya a ser la sombra de un pigmeo ¡La inteligencia de unos pocos percibe aquello que se oculta! Razón tenía aquel ciego que dijo: “Deberían envidiarme todos, pues tengo la ventaja de amar a las personas por lo que son, y no por lo que aparentan ser”. Tu vida es como un libro en el que a todos les está permitido ver el título, pero solo los que te aman llegan a ver el contenido. Robert Walser dijo: “A menudo las apariencias engañan, señor mío, y lo mejor es dejar el juicio sobre una persona a esa misma persona. Nadie puede conocer tan bien como él mismo a un hombre que ha visto y vivido tanto”.