Odio cuando me preguntan: “¿Y el novio?”, como si fuera malo estar
soltera. Alguien me dijo: “Eres demasiado bonita para ser soltera”. A lo que respondí:
“NO… ¡Soy demasiado bonita como para que mientan, engañen y jueguen conmigo!”.
No necesito pareja para ser feliz. Lo que necesito es ser yo misma, disfrutar
de lo que tengo y vivir el día a día con alegría. Si no eres feliz soltera,
tampoco lo serás en una relación. La felicidad viene de tu interior, no de un
hombre. Demasiadas mujeres se lanzan al romance porque tienen miedo de estar
solas, luego empiezan a hacer compromisos y a perder su identidad ¡Yo no voy a
hacer eso! Yo no soy antojo, ni desquite, ni plato de segunda mesa, ni juguete
de nadie. ¿Sufrir porque estoy soltera? ¡Que sufran los hombres, porque ninguno
es mi novio! Soltera y entera, pero no para cualquiera. Sé que muchos tienen
pareja menos yo, pero también muchos tienen cachos menos yo. ¡Mejor soltera y
relajada que llevando cachos y amargada! Hoy por hoy estoy más ilusionada en
encontrar un billete de veinte mil colones en un jean, que al amor de mi vida. Un
día dije: Dios líbrame de todo mal… y me volví soltera ¡Una naranja entera! Con
decirte que cuando Cupido me vio, dijo: “Tú no, tú sigue divirtiéndote, que
soltera te ves mejor. Lo bueno de ser soltera es que puedes salir a donde sea y
con quien sea. Soltera si… ¿Sola? ¡Jamás! Je je je
