sábado, 10 de febrero de 2018

Suspiros



“¡Qué lejos estamos (suspiré) de nosotros mismos!”. Razón tenía el que dijo que en un suspiro se encuentran las almas enamoradas que la distancia separa. ¿Qué es suspirar? Es el aliento que me sobra por ti, cuando me haces tanta falta. Suspiro un algo que solo alguien como tú me puede robar. Un deseo inmenso de encontrarte de noche, bajo esa sombra, bajo esas sabanas. Hay un suspiro cada vez que pienso en ti. ¿Qué cuantas veces te he pensado? ¡Ya perdí la cuenta!  Pensamientos y suspiros vuelan hacia ti con bandadas de besos ¡Y tú sin darte cuenta! Todo aquello que no te puedo decir con palabras lo suspiro en silencio ¡Lo callo a gritos! Suspiros que nadie oye, sonrisas tristes que nadie ve, frases que nadie entiende que terminan convirtiéndose en canciones y poemas. ¡Suspiros que encierran más amor que cualquier beso! ¿Sabías que me robas suspiros con solo recordarte? Tal vez no salgan lágrimas, pero siempre, y sin darme cuenta, extraes de mi ese pequeño trozo del alma que se fuga, por la comisura de mis labios, dejando un inmenso espacio en el corazón, para que sea ocupado por tu recuerdo. Y es que no solo te extraño en la madrugada o en mis ratos de soledad. También te extraño a las 11 de la mañana cuando estoy en medio de una carcajada  con un grupo de amigos y de la nada me detengo, y suspiro: “Ojala estuviera aquí, o yo estuviese ahí, o tan solo estuviéramos juntos”.