martes, 20 de febrero de 2018

Todo entra por los ojos



Una imagen vale más que mil palabras. Todo es juzgado por su apariencia La primera impresión entra por los ojos ¡Salta a la vista! Lo que no se ve no cuenta. Un paso en falso o un cambio repentino pueden resultar desastrosos. No tendràs una segunda oportunidad para una primera impresión. ¿Sabías que, en el fondo, el poder del mensaje de una persona está íntimamente relacionado con el modo en que los demás perciben a esa persona? Cada quien ve lo que pareces, pocos palpan, lo que eres… Maquiavelo dijo: “Pocos ven lo que somos, pero todos ven lo que aparentamos”. Por eso tiene suma importancia salvar la apariencia. ¡Todo está bien si parece bien! No es necesario que un príncipe posea ciertas cualidades, pero es imprescindible que parezca tenerlas. Por eso haga que todas sus acciones resulten dignas de un rey. Sea sublime en sus actos, elevado en sus pensamientos. Y en todo cuando haga demuestre que merece ser rey, aun cuando no lo sea en realidad. La señal de la grandeza es cuando todo lo que vino antes de ti es obsoleto, y todo lo que vino después de ti lleva tu marca. Jeff Bezos dijo: “La marca personal es lo que dicen de ti cuando no estas presente”.