Se nos olvida que la vida da muchas vueltas y que ella se encarga
de poner todo y a todos en su lugar. Calma en el alma… tarde o temprano la vida
se encarga de explicar las cosas que hoy no tienen sentido y de recordarte lo
que de verdad importa, pero siempre con el dolor como instrumento para hacerlo.
No pierdas tiempo, energía, ni paz y deja que sea la vida la que se encargue de
aquellos que te hacen mal. ¡Al final se terminan autodestruyendo! Porque ¡Quien
riendo la hace, llorando la paga! La gravedad lo devuelve todo. De ahí el
cuidado de escupir para arriba. La vida se encarga de poner en tu camino
personas que te demuestren con sus acciones, que, para ser familia, no hace
falta tener la misma sangre. Por tanto, encárgate solo de la gente que quieres
y que te quiere. No todo es color de rosa, y si la vida te cambia los planes para
bien o para mal siempre habrá una solución, aunque a veces no la veas. Lo que
no necesitas en tu vida, la misma vida se encarga de alejarlo. Pero nunca dejes
de amar porque la vida también se encarga de devolverte lo que das. Si lo das
de corazón y con sinceridad regresa a ti con mayor proporción. Sin importar
como te paguen la recompensa viene de arriba. También la vida se encarga de
sacar en cara todo lo bueno que alguna vez hicieron por ti. Al final la vida se
encarga de poner cada cosa en su lugar… a cada rey con su reina y a cada payaso
en su circo.