viernes, 23 de noviembre de 2018

Nadar contra corriente


Es verdad que un rio nunca fluye hacia atrás, pero quien dijo que: ¿No puedes nadar contra su corriente? Woodrow Wilson decía que: “El hombre que está nadando contra la corriente conoce su fuerza”. Yo le añadiría: “Sabe lo que quiere y luchará por ello contra todo”. Nunca ha sido fácil nadar contra la corriente. No lo es para un pez, menos para un ser humano. Sin embargo, solo los peces muertos siguen la corriente. ¡Todo lo difícil merece la pena! Si uno quiere llegar a donde la mayoría no llega, necesita hacer algo que la mayoría de las personas no hacen: Ir a favor de sus aspiraciones y en contra del mundo. Algunos dirán que nadar contra corriente no sirve, que puedes cansarte e incluso te arrastrará más atrás de tu punto de partida, pero pese a lo que digan, la opinión de la mayoría y la verdad no es lo mismo. Para triunfar hay que nadar contra la corriente de los mediocres que te quieren ver hundido. La vida es como un rio; puede llevarte por la corriente y acabar en la parte más baja o puedes nadar en contra y acabar en la cima de la montaña. Solo nadando contra corriente es posible alcanzar la fuente. Recorre el camino inverso y no tomes en cuenta la sabiduría convencional. Lidia con las opiniones ajenas, que todo cueste el doble, pero disfruta los éxitos el triple. Dite a ti mismo: “Conmigo quien quiera, contra mí, quien pueda”.