En la vida todo llega, todo pasa y todo cambia… Ninguna cosa y
ninguna emoción son permanentes. La vida es por etapas. Si estás viviendo una
etapa difícil, recuerda que es solo eso, “una etapa” y es temporal. Por fuerte
que sea la tormenta recuerda: ¡Pase lo que pase… todo pasa! Pero no la dejes
pasar sin aprender, crecer, madurar y hacerte más fuerte. Siempre hay algo
bueno en cada etapa de la vida. Por más que sientas que la vida te golpea una y
otra vez… lucha por seguir. Ten presente que la vida no va a ser justa. Por eso
cada vez que te haga pasar un mal momento, debes demostrarle que eres lo
suficientemente fuerte para seguir avanzando. Algún día todo tendrá un perfecto
sentido. Por ahora, supera y sonríe. Toda situación es pasajera, todo está en
movimiento y todo tiene su ritmo. Todo pasa, las personas cambian para que
aprendas a dejarlas ir, las cosas salen mal para que aprendas el valor de
cuando están bien. Personas y cosas buenas se van para que pueden llegar
personas y cosas mejores. Con algo de paciencia lo inolvidable se vuelve olvido
y lo imprescindible sobra. Respira hondo, ya has pasado por esto otras veces.
Has estado incómodo, ansioso y asustado en otras ocasiones y has sobrevivido. ¡También
sobrevivirás a esto! No te puedes quebrar, esto también pasará, porque en la
vida “Todo pasa”.